Las piezas de jamón serrano procedentes de la raza duroc es la decisión mas acertada cuando queremos un jamón superior dentro de la variedad del jamón serrano. Se trata de una carne jugosa, con abundante infiltración de grasa. Su curación superior a los 20 meses harán que, al saborearlo, nos invada la intensidad de su sabor agradable y característico obtenido en su lento proceso de curación.
Su color rojo combinado con la grasa blanca o rosada hacen de estas piezas un placer a a la vista y, como no, al resto de los sentidos.